Esto era un padre que estaba en la sala de espera de un hospital. Su mujer acababa de parir y el estaba a punto de ver a su bebé. Al poco rato sale el doctor y le dice al padre:

-Su niño ya ha nacido.

Éste le pregunta si ya puede ver a su hijo, a lo que el medico le dice:

-Lamento decirle esto pero le aconsejo que no lo vea.

El padre, enfadao, le dice:

-Porque doctor? es que ha habido algún problema? Sea lo que sea quiero verlo.

-Bueno, usted mismo, pero antes le tengo que decir que su niño ha nacido sin brazos.

El hombre empieza a llorar y le dice al doctor:

-No importa, es mi hijo, sangre de mi sangre y quiero verlo.

-Sigo aconsejándole que no lo vea.

-Doctor! no quiero volver a repetirselo!

El doctor, finalmente le dice:

-Usted mismo, pero tambien le tengo que decir que el bebé ha nacido sin piernas.

A lo que el padre contesta:

-qué? sin piernas y sin brazos? no importa, le he dicho que quiero verle, y ahora mismo!

-Está bien, entre, pero antes de eso tengo que avisarle de una ultima cosa, su hijo no tiene tronco.

El padre desesperado y llorando, entra en la sala y ve en la cama una enorme oreja.

Al verlo, se pone las manos en la cabeza y empieza a gritar:

-hijo mio, que te ha pasado?

Y el doctor, que se encontraba en la puerta, le dice:

-señor, no se esfuerce, su niño es sordo...